Los Tres Encuentros del Cursillo marcan un proceso de conversión integral:
1
Encuentro con uno mismo
Descubro quién soy realmente, confrontando mis máscaras y errores. A través de la introspección y la gracia, reconozco la necesidad de cambiar mi vida y encontrar un propósito más profundo.
2
Encuentro con Cristo
Vivo una experiencia personal con Jesús como Padre, Amigo y Salvador. Comprendo que no estoy solo y que Dios me ama incondicionalmente. Los sacramentos fortalecen este vínculo.
3
Encuentro con los hermanos
Entiendo que mi fe se vive en comunidad. Soy llamado a ser apóstol en mi entorno, compartiendo el amor de Cristo a través de la amistad y el testimonio. La misión continúa en mi vida diaria.
Estos tres momentos no solo ocurren durante los tres días del Cursillo, sino que se profundizan en la vida diaria. El Cursillo no es un evento aislado, es un inicio de una nueva forma de vivir el cristianismo con autenticidad, alegría y compromiso.
Es una forma de vivir DeColores!
